En Limaná, cada detalle cuenta, y nuestras relaciones con los proveedores no son la excepción. Trabajamos d ela mano con ellos para construir una operacion mas limpia y consciente. Por ello, hemos establecido acuerdos claros para reducir el uso de plásticos, especialmente en el caso de productos vegetales que provienen de huertos. Creemos que la frescura de la tierra no necesita envoltorios que dañen el entorno.
Tambien trabajamos con algunos de ellos para dar una segunda vida a los empaques de vidrio. Los recibimos, los utilizamos y, cuando es posible, los devolvemos para ser reutilizados, cerrando un ciclo que respeta los recursos y evita el desperdicio.
En Limaná, entendemos que la sostenibilidad es un esfuerzo compartido. Cada colaboración, cada práctica responsable, es un paso hacia un modelo más consciente, donde lo que consumimos no deje una deuda con el planeta.
